La desesperanza de Oaxaca es la de todo Mèxico
En Oaxaca se està revelando la insoportable situaciòn polìtica-social y econòmica en que el Sistema colonialista, caciquil y capitalista ha tenido sometidos a los Pueblos de Oaxaca. Como la situacion es semejante en otras regiones, la insurrecciòn amenaza con desbordarse. Por eso, Oaxaca se refleja en Mèxico y viceversa.Aquì la reflexion de un antropologo oaxaqueño.
Ignacio Zermeño (Revista Sinarquìa)
(( De Revista Sinarquìa: http://sinarquismo.blogia.com O Comunidad Sinarquista: http://mx.groups.yahoo.com/group/sinarquistas/message/2421 )) La crisis que se vive en Oaxaca debe ser analizada a profundidad para encontrar las causas fundamentales, y con ello, tratar de resolverlas para que un suceso así no se vuelva a repetir. Primero tendremos que señalar que existen causas históricas que tienen que ver con un sistema injusto en el reparto de la riqueza y el acceso a las oportunidades. El sistema colonial en los estados del Sur es más brutal e injusto que en el Centro y Norte del país. El subdesarrollo es producto de una ideología que se traduce en una forma de vida. El Sur-Sureste es la parte indígena de la nación y como los pueblos indígenas siguen siendo explotados ferozmente, ni se crea una gran riqueza, ni se genera justicia social y lo único que se multiplica es la marginación y la pobreza. No es casual que en el Norte del país, donde existe menor riqueza natural, el trabajo produzca la mayor riqueza de la nación. No es que los sureños seamos malos trabajadores o incapaces, porque en E.U. son los más apreciados. Lo que sucede es que el sistema es mucho más injusto y unos cuantos abusan de muchos de una manera despiadada. Lo que sí es cierto, es que "esos cuantos", no tienen el "espíritu productivo" que los hermanos del Norte. Son "miopes alpargateros explotadores" que lo único que saben es esquilmar al indígena, pero no tienen la capacidad (aunque tengan el dinero) de generar grandes proyectos industriales y comerciales. Explotan mucho e invierten poquito de manera amafiada. La pobreza en el Sur-Sureste es un fenómeno cultural generado por una forma de ver el mundo y la vida. Otra de las causas es el rezago político-social, por lo que el cacicazgo político y económico, que se sustenta en el bajo desarrollo intelectual y social, además de la gran corrupción en el gobierno, impiden el desarrollo económico y social. El saqueo, la impunidad, el compadrazgo y el nepotismo que se vive en los gobiernos del Sur-Sureste, es mucho más grande que los del Centro-Norte. Otro de los problemas es que los "ricos y riquillos" del Sur-Sureste, en general, son gente mucho más limitada. No solo en capitales, sino en la visión empresarial. Son de miras cortas, no arriesgan, ellos siempre van a lo super seguro y siempre con ventaja leonina sobre los demás. No están acostumbrados a una economía abierta y de libre competencia. Los vicios antes señalados para el aspecto político, también son válidos para el comercio, de modo que en el Sur-Sureste, la política y el comercio, casi resultan lo mismo. Los caciques comerciales se convierten en caciques políticos y viceversa. Ya hemos tratado en otra entrega, la problemática de la inestabilidad de los gobernadores oaxaqueños durante el siglo XX, que tiene que ver con el milenario legado cultural de participación y organización social del México antiguo, que sigue vivo y presente en el México contemporáneo y que para la cultura dominante "no existe". También hemos señalado, que el problema de Oaxaca no es la pobreza, sino la INJUSTICIA, de la que deviene la pobreza. De las injustas relaciones sociales, políticas, económicas, productivas, comerciales y educativas que privan en Oaxaca, deviene la pobreza y la miseria. Dicho de otra forma. La injusticia es la generadora de la pobreza y el subdesarrollo. El conflicto que vive Oaxaca es una explosión social. De alguna manera su génesis y su desarrollo, es muy perecido al del movimiento estudiantil de la ciudad de México en 1968. Tanto en aquél como en este, no hubo "una conspiración maquinada" en contra del gobierno, ni guerrilla, ni ningún gobierno azul o rojo financió el movimiento. Fue en el 68 y en Oaxaca, una serie de hechos encadenados que, debido a los grandes errores del gobierno, crecieron hasta rebasar al propio gobierno y desestabilizar la paz social. El gobierno de Ulises Ruiz de ninguna manera se puede presentar como "víctima de una conspiración". Ulises Ruiz es responsable de lo que esta sucediendo en Oaxaca, porque todo se le salió de las manos, por prepotente, falta de tacto político y oficio para gobernar. No quisieron escuchar las críticas y las advertencias que en su momento se dieron, no solo en la prensa, sino en los mismos corredores del poder. No se podía llegar a Oaxaca con un "cuestionado triunfo electoral" y empezar el gobierno pasando sobre los intereses políticos y económicos de los demás. No podían transgredir y destruir el Patrimonio Cultural de manera impune y prepotente. No podía ser un gobierno de amigos para los amigos. No se podía excluir a la clase política. Ulises Ruiz y su gobierno son los depositarios temporales del poder popular, pero no los dueños de Oaxaca. Todos estos errores propiciaron la insurrección popular. Que no es todo el pueblo, eso también es cierto. Pero, ¿quiénes son los que están con la insurrección popular? Las personas que están cansadas de tanto abuso, no solo de este gobierno, sino de todos. Las personas que no tienen nada que perder y mucho que ganar a río revuelto. El magisterio oaxaqueño, junto con la CENTE han sido los únicos que se han atrevido a cuestionar las medidas inhumanas del neoliberalismo económico y globalizador, al que nuestros gobiernos sumisamente han acatado todos sus dictados, empobreciendo a la clase media y baja. Este espíritu combativo los llevó a enfrentar al gobierno de Ulises Ruiz, quien por nota comenzó con errores políticos y de falta de sensibilidad. Por otra parte, Oaxaca ha sido criminalmente abandonada por el gobierno de Vicente Fox, quien solo fue "administrando la crisis" para usarla en sus triquiñuelas electorales. Fox no solo no ha resuelto el problema, lo que es peor, lo ha usado en su beneficio político. De la misma manera, los políticos y los partidos políticos, solo están usando los problemas de los mexicanos para sus luchas por el poder. El México profundo esta siendo abandonado y utilizado por el México imaginario, pero en ello, se esta creando una bomba de tiempo. Lo que esta pasando en Oaxaca debe ser un foco rojo que indica que la sociedad mexicana en su conjunto, esta inconforme, violentada y desesperada. No solo por el supuesto fraude electoral, sino porque se han dado cuenta que no tienen futuro. Millones de mexicanos que no tienen las condiciones mínimas para vivir modestamente han sido llevados a la desesperación social, hagan lo que hagan, no dejarán nunca de ser pobres… con la excepción de los que se dediquen a la delincuencia organizada y el narcotráfico. Las pocas personas que tiene lo suficiente, los escasos que tienen una buena forma de vida y los poquísimos que tienen todo sin medida… tienen que empezar a pensar que un país así, no es posible. Que el país ya no aguanta mucho. Que los pobres y desahuciados sociales cada día son más y están desesperados porque no tienen verdaderas oportunidades para salir de la pandemia de la miseria. Que cada día en la TV y en las tiendas hay más cosas que comprar y que cada día hay más gente que no tiene nada para vivir. Que hemos construido una sociedad caníbal e insensible, en el que le rendimos culto desmedido al becerro de oro y hemos destruido los valores y los principios ancestrales, que todo es el dinero por el dinero, el tener para ser, el cuánto tienes cuánto vales, en el que el desarrollo de los valores éticos y morales, así como la espiritualidad son desechados y menospreciados. Que hemos aprendido a no sentir ninguna responsabilidad por los que no tienen. Cómo si fueran de otro mundo, de otra dimensión, de otro país, los vemos indiferentes, distantes y ajenos a nosotros. Pero se nos olvida que "ellos son nosotros", que si ellos están bien nosotros estaremos bien, que si ellos tienen futuro nosotros tendremos futuro. La insurrección popular que vive Oaxaca, no solo es por un mal gobierno, sino por un sistema injusto e inhumano que TODOS tenemos que cambiar, usted y yo, amable lector. Se tiene que resolver pacíficamente el problema de Oaxaca. No es con posiciones legaloides, porque en su momento los encargados de hacer cumplir la ley fracasaron y el problema se les salió de las manos. No es por medio de la violencia, porque se esta "jugando con fuego", esta insurrección popular se creció precisamente por la represión en el frustrado desalojo. Los pobres y desahuciados sociales cada día son más y están más desesperados. El malestar social es más que evidente. Los ricos y riquillos que están bien "enchufados en el sistema colonial de explotación", deben empezar a pensar en que se debe repartir la riqueza con mayor justicia, que se deben pagar buenos sueldos y que no se puede seguir explotando a la gente, dándoles mayores oportunidades de ser y tener. Deben de dejar de pensar "solo en sus pérdidas" y deben empezar a pensar en las pérdidas históricas de las mayorías que por siglos viven en la pobreza. El verdadero problema no es un mal gobernador o una Oaxaca insurrecta, el verdadero problema es una ancestral explotación del pueblo de México, por un sistema de explotación abusivo y deshumanizado. El problema es que vivimos en una sociedad colonial y no nos damos cuenta de ello. No tenemos ojos para ver la injusticia, la explotación, la desesperación, la tristeza y desesperanza de nuestro pueblo. gmarinn@gmail.com (*) Director del CINDICULMEX del Instituto de Estudios Superiores de Oaxaca. En Comunidad Sinarquista en Internet http://sinarquismo.blogia.com |
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