El Sapo
El Sapo
28 de mayo de 2008
El finado Chalino Sanchez, idolo, su estilo de cantar nativo a las sierras de Durango y Sinaloa. En su estilo de cantar se percibe todavía la fuerte influencia de los cantos de las tribus guerreras nativas a estas tierras.
Chalino interpreta el corrido de “El Sapo.” Se puede escuchar aquí:
http://www.youtube.com/watch?v=Qk37JCiZoMk
El corrido trata de un matón que al final de su vida se convierte a la Fe.
El Sapo era el apodo de José Ortiz Muñoz. El Sapo fue un asesino formado dentro del ejército mexicano para exterminar fríamente a cualquiera que se opusiera al gobierno de México.
Según la cuenta del Sapo, a la edad de 45 años ya había asesinado a más de 100 personas gracias al ejército mexicano.
El Sapo ingreso al ejército a los quince años. El Sapo comete el descuido de no saludar a un oficial. El oficial le da una paliza, el Sapo responde con una daga y mata al oficial.
El Sapo fue sentenciado a morir fusilado. Pero curiosamente recibió un perdón. Para el ejercito el Sapo era más valioso vivo que muerto. Este era la clase de hombre que necesitaba el ejército. Desde entonces el Sapo gozaría de una licencia para matar.
En 1938 el Sapo se convirtió en cazador de Cedillistas, matándolos a su gusto. Pero eso no se compara al gusto que sintió cuando acribillo a Sinarquistas. En una entrevista que dio el Sapo este relataba que nunca se dio tanto placer y vuelo matando como cuando ametrallo a los Sinarquistas en León, Guanajuato. Decía el Sapo que, -La sangre corrió ese día.
Fueron 27 personas incluyendo muchachas jóvenes que cayeron ese Enero de 1946, varios cuales ni siquiera eran sinarquistas. Su crimen fue protestar contra el gobierno municipal impuesto por los caciques políticos.
El Sapo es interesante porque nos ilustra cual es el producto humano del ejército mexicano. Existen innumerables Sapos que ha producido el ejército Mexicano. Jóvenes pobres, analfabetas, expuestos a un régimen de condicionamiento psicológico.
Este condicionamiento psicológico tiene el fin de producir una psicosis en estos jóvenes vulnerables por su poca capacidad intelectual, por su inmadurez, su juventud ingenua.
Convertirlos en sicóticos asesinos que ya no ven a una madre, a un padre, a un hermano, a una hermana, a un hijo, a un abuelo, a su raza, sino que ven solo a enemigos que deben morir.
Un gobierno criminal como el mexicano de vez en cuando tiene que exhibir demostraciones de poder para sostener la percepción de que es todo-poderoso. Es decir de vez en cuando es necesario matar a unos cuantos para asustar a los “indios” recordarles su lugar que deben ocupar en este orden.
El ex-presidente de México, Echeverría, infame traidor que también fue agente de la CIA, al mejor estilo del Sapo, asesino a cientos de gentes en Tlatelolco. Es decir dio una demostración de poder. Acto que lo califico ante la CIA como apto para ser presidente de México.
Pero fueron gente como el Sapo que hizo el trabajo sucio, condicionados sicóticamente para ensañarse contra gente inocente.
Hoy nos dice el gobierno que estos sicóticos son héroes y que necesitan nuestra ayuda.
Pero no necesitaban ayuda cuando masacraban a los Sinarquistas en León, no necesitaban ayuda en Tlatelolco, no necesitaban ayuda en tantas otras demostraciones de poder en la triste historia de México.
3 comentarios
FCO,JAVIER VAZQUEZ PACHECO -
Aníbal Valenzuela -
Por cierto ¿sabes que el combate al narcotráfico que tanto nos está aplaudiendo el mundo no es una labor del ejercito? pero por comodidad los político le han dejado este quehacer porque los demás cuerpos armados son unos ineptos, corruptos y cobardes. ¡Ni el gobierno confía en su policía! No digo con esto que no haya gente corrupta en el ejercito pero si digo que son más las cosas buenas que nos brindan el día a día a los mexicanos
Con respeto y seguro de mis palabras.
Aníbal Valenzuela
carlos -